Los resacones...

Hola de nuevo, amig@s

¿Qué os voy a contar de un resacon, que no sepáis ya? Una y otra vez, esos domingos que llegas a casa a las 6:00 AM medio muerto y te dices a ti mismo: “la ultima vez, esto nunca mas, que ya estoy mayor” pero luego, en el momento de decir que no, flaqueas y sales… porque es carnaval, porque es San Valentin, porque es lo que sea…

¡¡Tranquilos, que solo llevo el puntito cogido!!

¡¡Tomate esta botella, guapo,
que me veras con mejores ojos!!

El problema es que salimos y como todo el mundo bebe, pues no vamos a ser los unicos panolis que no lo hacemos... Por ejemplo, recuerdo que Lolita ordeno a su sumisa, la Señorita S, beber únicamente agua durante todo un fin de semana, y claro, cuando salió de marcha por ahí, sus colegas llevaban un cachondeo del carajo, porque pedía un botellin detrás de otro... 

A medida que la noche avanza, el espectáculo que provoca el alcohol en la gente es de una belleza sin igual... Las personas empiezan a perder los papeles y sale el animal que todos llevamos dentro... En esos momentos, debemos ser muy cautos, pues podemos toparnos con algun elemento/a que convierta nuestra noche de diversión en una película de terror.

Hay que prestar especial atención a la cantidad de alcohol que nosotros mismos hemos ingerido, porque una dosis elevada puede alterar nuestra agudeza mental... y en muchos casos, podemos despertar en casa ajena, abrazados a vete tu a saber que...

Incluso, a mi me han llegado leyendas urbanas de hombres y mujeres, que tras conseguido llevarse a algún incauto a su domicilio, no han podido rematar la faena, porque uno de los dos se ha quedado dormido presa del tremendo colocón... y hasta lo peor que le puede pasar a un hombre... sufrir una disfuncion eréctil transitoria, que dejara nuestra reputación marcada de por vida. Como dice mi madre: "si no vas a poder cocinar, mejor no enciendas el horno".

Afortunadamente, simpre podemos contar con nuestros amigos para que nos saquen de estos lios.

 

Mira que amigos mas majos tiene esta bebedora social

En nuestro caso, como somos pareja, salimos a cenar… pero ojo, que uno ya tiene una edad y es perro viejo… Lolita y yo, nos dimos los regalitos de San Valentin por la tarde… y como no, algunos eran XXX, lencería, un kit de masajes, etc  etc… y yo, como dije antes, soy perro viejo y se lo que pasa después, que tras la cena copiosa, el alcohol y demás, uno tiene una edad, que ya no esta para hacer florituras a las tantas de la mañana…

Resumiendo: llegamos al restaurante muy relajados… tanto, que por poco no vamos.

Y es que amigos/as, pudiendo dedicar toda la tarde a estar con tu pareja… que manía con hacerlo a las tantas, en 20 min, deprisa y corriendo… no, no, no…

Un abrazo a todos!!